El nefroblastoma (tumor de Wilms) es el más común de los tumores renales en los niños. Se lo detecta en forma ecográfica incidental en busca de alguna otra patología o bien asociado a síndromes que comúnmente se relacionan con él. Una vez sospechado, se debe realizar una serie de protocolos tanto de diagnostico como de tratamiento quimioterápico y siempre ser evaluando e individualizando el tratamiento en cada caso en particular por un equipo multidisciplinario. Siendo la posibilidad quirúrgica en todo momento.