Un raro tipo de cáncer que se da en niños pequeños, es complejo y requiere de un abordaje por un equipo especializado. Es importante saber que el Neuroblastoma puede darse en diferentes formas, y puede tener un pronóstico diferente según cada caso, existiendo un tratamiento específico que debe ser individual para cada paciente. Se puede originar en cualquier parte del cuerpo, pero es frecuente el nacimiento en las glándulas suprarrenales, otros sectores del abdomen, el cuello o el tórax. Las células cancerosas del Neuroblastoma pueden distribuirse rápidamente a otros lugares del organismo (metástasis) como la médula ósea, ganglios linfáticos, hueso, pulmones o sistema nervioso central. En muchos casos el cáncer ya se encuentra diseminado al momento del diagnóstico.
Los síntomas son muy variables dependiendo del tamaño, localización del tumor o edad del niño afectado.
Un equipo de diferentes especialistas integrado por Cirujanos Oncólogos Infantiles, Radioterapeutas, y Oncólogos Pediátricos, con amplia experiencia en el tratamiento del Neuroblastoma deben presentarse a la hora de tratar esta patología. Cada niño es evaluado cuidadosamente, eligiendo en forma individual, en el contexto de protocolos de tratamiento internacionales, cuándo debe utilizarse cirugía, o quimioterapia, radioterapia o transplante de médula ósea.